PATRIA SOY ALGO TUYO QUE ESTÁ ALLÁ AFUERA
En octubre de 1979, en pleno recrudecimiento de la violencia represiva y económica de la dictadura cívico-militar, en Santiago, el Servicio Paz y Justicia de Chile (SERPAJ), en un osado acto público, hace un llamado a solidarizar con los pobres y oprimidos. En este encuentro liberador, de denuncia y condena a la cultura de división entre chilenos, de represión y de la muerte, el SERPAJ, rindió homenaje y reconocimiento, a quienes simbolizaban y desarrollaban acciones en favor y protección de los oprimidos por el régimen dictatorial. Rinde homenaje a la Vicaria de la Solidaridad, al ex Vicepresidente Bernardo Leighton, al ex sindicalista Clotario Blest, y al ex senador Rafael Agustín Gumucio, en quien simbolizan la situación que afectaba a miles de compatriotas en exilio.
Este documental, inspirado en este homenaje, es el producto del encuentro realizado con Don Rafa, en su casa de exilio en París. Es el testimonio de un servidor público ejemplar, admirado y estimado por todos. Mensaje donde Don Rafa se confía y nos muestra fragmentos de vivencia de su exilio, al final de un frío invierno parisino, hace ya cerca de 40 años.
Testimonio, que de manera simple, sencilla y con mucha emotividad, está lleno de convicciones. Sus palabras reflejan la modestia e integridad de ese gran hombre, de sólidos valores y principios. Quien en forma activa, durante más de 60 años, aportó y contribuyó, al desarrollo y evolución del pensamiento socialmente comprometido de los cristianos y humanista en nuestra sociedad. Y que, a 12.000 kms de la patria, nos interpelaba y nos hablaba de su profunda amargura de la vida en exilio, de sus angustias y de la nostalgia por su Chile usurpado, el Chile que le « había sido robado ».
Este documento-testimonio, evidencia la precariedad de la vida en el exilio, y destaca el rol y aportes de los exiliados. Es un documento de archivo, que viene a desmentir ciertos prejuicios que hablan de lo « dorado » de la vida en exilio. Nos interpela y nos invita a reflexionar sobre lo necesario del reconocimiento y consideración al dolor y traumatismos que acongojan a aquellos que forzados, debieron someterse al destierro de la patria.